ACM, en la junta directiva del Comité Minero Energético
Recientemente se llevó a cabo en Bogotá la Asamblea General del Comité Minero Energético, sesión en la que se eligió a la nueva junta directiva. En esta oportunidad ACM hace parte de este órgano en representación de los gremios del comité durante el próximo año y estará trabajando junto a tres empresas del sector y la organización de la sociedad civil, CREER, para orientar las actividades del CME.
“Es importante que las empresas del sector extractivo estén comprometidas con la labor que desarrolla el CME, porque una vez más estos procesos nos ayudan a mostrar que no improvisamos, que somos estudiosos de las mejores y más actualizadas prácticas en debida diligencia que se aplican a nivel nacional e internacional”, asegura la directora de Sostenibilidad y Desarrollo de la ACM, Carolina Gutiérrez.
Pero, ¿Qué es y de qué se encarga el CME?
El Comité Minero Energético fue creado hace 20 años e integra los tres subsectores que conforman el sector minero energético: energía, minería e hidrocarburos. En el comité participan, además de las empresas del sector, cámaras de comercio y embajadas de los países que tienen inversiones en Colombia, gremios, organizaciones de la sociedad civil, la academia, el Gobierno Nacional mediante el Ministerio de Defensa, las Fuerzas Militares y la Superintendencia de Vigilancia, organizaciones internacionales y firmas de consultoría.
El Comité trabaja en la mejor forma de llevar a cabo la debida diligencia y de proteger los Derechos Humanos en torno a la seguridad física de las operaciones del sector eléctrico, minero y petrolero, bajo la guía de los principios voluntarios y los principios rectores de los Derechos Humanos. “Esa es la columna vertebral relacionada con los derechos humanos y se aplica a las mejores prácticas. Entre otros temas, el grupo revisa los contratos de las empresas con el Ministerio de Defensa y la Policía Nacional; hemos diseñado diferentes productos y nos compartimos mensualmente buenas prácticas, por ejemplo, en torno a cómo manejar una protesta social de la mejor forma, respetando los derechos humanos y cómo hacer denuncias y proteger a los defensores de derechos humanos en el territorio”.
Mejores prácticas en Derechos Humanos
Durante los años de trabajo del CME, la organización ha recopilado las mejores prácticas en debida diligencia y Derechos Humanos del sector extractivo. “Contamos con una biblioteca de experiencias, útiles para las empresas que comienzan con un proceso de exploración y que podemos compartir con ellas. Estamos actualizados y llevamos una trayectoria de 20 años diseñando productos en esta línea. En este momento, por ejemplo, estamos adelantando un piloto con Frontera Energy y Puerto Gaitán, que consiste en el desarrollo de una guía de cinco fascículos que habla de cómo llegar al territorio, con quién relacionarse y cómo documentar todos los procesos”, explica Carolina Gutiérrez, directora de Sostenibilidad y Desarrollo de ACM.
La ejecutiva destaca: “Nuevamente el sector minero energético demuestra que no improvisa, sino que siempre está a la vanguardia de las últimas mejores prácticas que hay en torno a Derechos Humanos y seguridad física, en torno a las mejores prácticas sociales y ambientales en Colombia”.
“Tenemos grupo de oro y cobre en Derechos Humanos, grupo de carbón y Derechos Humanos, tenemos muchas instancias paralelas que se van ocupando específicamente de los temas y que se unen y redundan en las mejores prácticas que una empresa puede hacer tanto a nivel global como territorial”.
¿Cuál es la clave de que en el CNE participe la sociedad civil?
Una de las organizaciones miembro del Comité Minero Energético es CREER, especializada en temas de debida diligencia y de respeto a los Derechos Humanos y que goza de mucha credibilidad tanto en el país como a nivel internacional. “Es un actor clave para compartirnos las experiencias y ayudarnos a construir algo cada vez mejor. Ellos son muy objetivos y nos ayudan a integrar a las empresas con los demás participantes de la sociedad: gobierno, ONG, comunidades. Allí damos nuestros puntos de vista y construimos y nos ponemos en los zapatos de cada uno, porque cada uno tiene sus diferentes retos y oportunidades en estos temas de Derechos Humanos, de seguridad física, de seguridad de las comunidades y de los defensores de derechos humanos”.
¿Cómo garantizan las empresas mineras sostenibles el cumplimiento de los Derechos Humanos?
Las empresas mineras colombianas afiliadas a la ACM están comprometidas con el cumplimiento de los Derechos Humanos. El gremio hace parte desde hace cuatro años del CME y ahora está en la junta. Regularmente, el gremio promueve y participa en el grupo de “Carbón y Derechos Humanos” que se reúne mensualmente para evaluar todas las prácticas que se pueden compartir en torno a los derechos humanos. El gremio también fundó en el marco del CME el grupo “Oro, Cobre y Derechos Humanos”, que se ocupa de enseñarles a las empresas cómo evaluar sus impactos, cómo minimizar los riesgos, cómo construir un plan de acción en torno a los riesgos que tienen las empresas y que pueden llegar a vulnerar los DDHH. “Hay un interés de las empresas por este tema y simplemente por el hecho de estar afiliados a la ACM, les damos lineamientos y directrices importantes en torno a estos temas”.
¿Cómo se relaciona el TSM con los Derechos Humanos?
El programa de sostenibilidad Towards Sustainable Mining -TSM- no tiene un protocolo específico para Derechos Humanos, pero estos son intrínsecos y diagonales a los nueve protocolos que conforman el programa: cuando hablas de ambiente, de equidad de género, de prevención del trabajo infantil, de relacionamiento, todos estos temas tienen que ver con el respeto y la protección de los Derechos Humanos.